Disfrutar de un trocito de naturaleza en casa, un espacio de relax entre tiestos llenos de color, es un privilegio. ¡Vacía de trastos inservibles el balcón y llénalo de plantas de flor! No hace falta mucho más. No obstante, toma nota de estos consejos antes de escoger los contenedores y las plantas.
¿Cuánto peso puede soportar tu balcón?
De ello dependerá el tamaño, el material y la cantidad de tiestos que podrás colocar. Ten en cuenta que las dimensiones de las jardineras están directamente relacionadas con la cantidad de sustrato húmedo que podrán contener y el tamaño de las plantas.
¿Cuánta luz recibe?
La orientación es un factor clave para escoger bien las plantas. Si es norte, las que necesitan mucho sol no florecerán en abundancia y es probable que se ahilen buscando la luz; deberás buscar especies que vivan bien con unas pocas horas de sol mañanero.
Si la orientación es oeste deberán ser capaces de soportar el intenso calor de la tarde.
¿Cómo vas a regarlas?
Si son pocos tiestos podrás regarlos a mano con una regadera, pero si son bastantes y tienes una toma de agua cercana, lo más práctico es instalar riego automático por goteo, que te ahorrará trabajo, tiempo y agua; los goteros regulables permiten darle a cada ejemplar exactamente la cantidad que necesita.
Los tiestos con reserva de agua son también una buena solución. Piensa que plantas que viven en contenedor están más expuestas a quedarse secas, ya que la cantidad de sustrato del que disponen es limitada.
¿Cómo agrupar las plantas?
Si colocas los ejemplares en las jardineras del balcón sin extraerlos de los tiestos del vivero podrás hacer las mezclas que quieras. Si los trasplantas a un contenedor común deberás tener en cuenta la compatibilidad entre las especies, esto es, que sus necesidades de riego y abono sean afines, y que ninguna tenga un sistema radicular invasivo que perjudique a las demás.
¿Qué sustrato conviene utilizar?
Si escoges sustrato para plantas de flor o, en todo caso, sustrato universal, les estarás proporcionando el medio de cultivo más apropiado.
¿Debes abonarlas?
La mayoría de las plantas de flor exigen aportaciones periódicas de un abono rico en fósforo y potasio para producir colores más vivos e intensos y una floración prolongada. Puedes utilizar abono líquido para diluir en el agua de riego, ajustando la dosis a las necesidades concretas de cada planta. En los tiestos grandes es muy práctico enterrar bastones o varitas fertilizantes.
¿Cómo hacer que reflorezcan?
Aparte de darles abono, si eliminas las flores marchitas e impides que semillen lograrás que sigan floreciendo largo tiempo. Si presentan un aspecto poco denso y pobre convendrá que las despuntes o pinces, es decir, que podes ligeramente el extremo de los brotes para que surjan otros laterales y se forme una mata más compacta y ramificada, que dará muchas más flores.
¿Cómo conservarlas sanas?
La mejor prevención está íntimamente vinculada a los buenos hábitos de cultivo: eliminar las malas hierbas y las flores pasadas, regar sin mojar las corolas, no abusar del abono, y usar insecticidas y fungicidas de forma preventiva (sistémicos) o ante los primeros síntomas (de contacto, ingestión). Las revisiones periódicas te servirán para detectar la presencia de plagas —pulgones, trips, araña roja, polilla del geranio— y hongos —oídio, roya— y actuar enseguida aplicando el producto adecuado.